La fragmentación y los precios desorbitados impulsan el regreso de la piratería en el streaming

Adiós a la luna de miel del streaming: la fragmentación y los precios lo hacen cada vez menos atractivo

Para nadie que esté atento al panorama de la piratería será una sorpresa que el streaming esté perdiendo su encanto. Un nuevo estudio revela que la culpa de esto la tienen la fragmentación y los precios cada vez más altos.

Más servicios, más costes, menos satisfacción

El auge del streaming se caracterizó por una explosión de plataformas que ofrecían un sinfín de opciones a cambio de suscripciones. Sin embargo, esta abundancia ha derivado en una fragmentación del contenido, obligando a los usuarios a pagar por múltiples servicios para acceder a lo que desean.

La paradoja de la elección: ¿demasiado bueno para ser verdad?

Si bien la competencia suele ser beneficiosa para el consumidor, en este caso ha llevado a una situación donde el contenido exclusivo se encuentra disperso entre diferentes plataformas. Esto, sumado a los precios cada vez más altos, ha empujado a muchos usuarios a volver a la piratería.

Las cifras lo confirman: la piratería está de moda

Numerosos estudios lo corroboran, y como bien informa TorrentFreak, la situación se torna cada vez más dramática para la industria del streaming. Una reciente encuesta estadounidense realizada por Cordcutting revela que alrededor de un tercio de los encuestados admite haber recurrido a la piratería al menos una vez durante el último año.

La Generación Z lidera la piratería, los boomers la resisten

Las diferencias generacionales son evidentes: entre los encuestados de la Generación Z (nacidos entre 1997 y 2012), casi tres cuartas partes confesaron haber descargado contenido ilegalmente, mientras que entre los baby boomers la cifra se reduce a un 28%.

¿Por qué la gente recurre a la piratería?

Las razones son variadas, pero las principales giran en torno al costo y la disponibilidad del contenido:

  • No vale la pena la suscripción: El 36% de los encuestados afirma que solo les interesa un programa o película en particular, pero no lo suficiente como para pagar una suscripción completa.
  • Precios demasiado altos: El 35% considera que los servicios de streaming en general son demasiado caros.
  • Barreras geográficas: El 35% señala que cierto contenido no está disponible en su región a través de canales oficiales.
  • Publicidad y tiempos de espera: Al 17% le molesta la publicidad o no quiere esperar a que un determinado contenido se publique oficialmente.

Un futuro incierto para el streaming

Si bien este tipo de encuestas siempre deben tomarse con cierta cautela, un dato queda claro: la mayoría de la gente desea un streaming más asequible. De hecho, casi el 75% de los piratas admite que usaría servicios legales si fueran más baratos.

La industria del streaming se encuentra en una encrucijada: debe encontrar un equilibrio entre la rentabilidad y la satisfacción del cliente. Si no lo logra, la piratería seguirá ganando terreno, poniendo en riesgo el futuro del modelo de negocio actual.

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